Tanto en el campo de golf como en la vida, demasiadas personas se quedan encapsuladas, estáticas, su zona de confort. Donde pueden jugar tranquilos, sin demasiados sobresaltos jugando solo aquellos golpes que saben que dominan o, como mínimo, que no les meterá en grandes problemas, incluso las veces que no es la mejor opción.
Una situación clara de jugar a golf en la zona de confort es la de mi padre en el juego corto. Es de las personas que más riesgos he visto tomar en la vida, valiente y decidido, pero alrededor de green no va a dar otro golpe que no sea un chip rodado con el hierro 8.
Eso no es malo ni bueno. Simplemente mata el progreso, directamente lo asesina. La mejoría viene cuando estamos en “la zona fea” del golf o de la vida, no encapsulados en nuestra zona de confort.
LA MEJORA SE ENCUENTRA EN LA “ZONA FEA”
Aunque es algo que saben todos los golfistas del mundo, casi ningún golfista aficionado emplea tiempo en practicar su golf de un modo que le ayude a producir cambios en su juego (ya sean internos o externos). En lugar de centrarse en mejorar se mantienen en su zona de confort practicando en exceso los aspectos técnicos del swing (eso los que practican) y cogiendo lo que yo llamo “ritmo de campo de prácticas” que mejora tus golpes a lo largo de la sesión de prácticas de forma efímera, ya que nunca se consolidan en una mejora de las habilidades para jugar en el campo de golf.
A nadie le gusta estar en “la zona fea”. A la hora de entrenar todos prefieren lucirse con sus mejores golpes antes que exponerse a sus fallos.
Simula la “zona fea” en tu práctica de golf.
Ya sabemos (y hemos visto) que el mejor lugar para practicar y mejorar de verdad es el campo de golf, en definitiva, es en el recorrido donde jugamos, por lo que es donde encontraremos las situaciones reales de juego.
Eso no significa que simplemente jugando en el recorrido vayamos a mejorar, tampoco que no se puedan recrear esas situaciones en el campo de prácticas. Evidentemente que es necesario trabajar y mejorar técnicamente, pero si lo que realmente quieres es convertirte en un golfista que juega bien bajo presión, necesitaras emplear tiempo de prácticas para meterte en “la zona fea” de tu propio golf.
Entrenar tu golf en “la zona fea” te ayudará a:
- Desarrollar una mentalidad sin límites.
- Mejorar tus habilidades de desempeño.
- Adaptarte rápidamente a los cambios y desafíos.
- Pensar claramente en situaciones complicadas.
- Estar más cómodo en la incomodidad.
- Lidiar con los nervios, presión y altos momentos de arousal.
¿Cómo entrenar en “la zona fea”?
Una de las claves para poder entrenar las debilidades (reales) de tu golf es recopilar las estadísticas de tu golf. Básicamente para conocer al detalle cuales son los puntos más flojos de tu juego y saber qué áreas hay que entrenar.
El segundo punto es recrear situaciones reales en esa área concreta de juego y medir el progreso, añadiendo así un poco de presión lo que dará más realismo al entrenamiento.
Por ejemplo:
Una de las áreas donde más deben mejorar los golfistas aficionados es en el juego corto, alrededor de geen. En este caso un buen ejercicio sería coger 10 bolas y colocarlas en distintas localizaciones alrededor de green; diferentes lies, distancias, etc.
El ejercicio consistirá en ver cuantas bolas (pegando una desde cada posición) puedes dejar a menos de 3 metros del hoyo. Ejercicio que se repetirá en cada entrenamiento, desde las ismas posiciones, con el objetivo de superar la marca.
Lo puedes extrapolar a todas las áreas del juego, dependiendo de tus DEBILIDADES; tirando a calle, tirando a green, desde bunker, con el putter…
Hacerte mejor golfista que tu yo actual.
Como diría el Dr. Dave Alred; en nuestros límites siempre estamos tratando de mejorar. Si un golfista es capaz de conseguir 10 (de algo) querrá conseguir 11, luego 12 y así sucesivamente. La filosofía de una mentalidad sin límites es que siempre vas a tratar de ser mejor que tu yo actual. Es ahí donde empieza el progreso.
La posibilidad de fracasar, la frustración y sentirse incomodo es todo lo que encontrarás en “la zona fea” de tu golf. Todo golfista debe aprender a mantenerse en lucha desarrollando estrategias mentales que le permitan mantener su confianza intacta y sobreponerse al miedo a fallar (tal como hace en el campo de golf cuando siente presión).
Practicar el rendimiento en situaciones reales es la mejor forma de acostumbrar al cuerpo y la mente a acceder a nuestras mejores habilidades técnicas, cuando realmente nos hacen falta. Entrenar y mejorar en los puntos flojos de tu golf, así como ir mejorando tus mejores marcas personales incrementará (y mucho) tu confianza en el campo de golf.
