¿Quieres ser mejor golfista? 1 requisito básico.

¿Cómo ser mejor golfista?

Una trampa común en la que caen muchos golfistas aficionados cuando quieren ser mejores golfistas es que pasan innumerables horas practicando y asumen que sólo eso ya les servirá para bajar sus resultados.

Por desgracia, no funciona así. Como golfista junior, solía frustrarme después de golpear cientos de bolas y no ver ninguna mejora real una vez en el recorrido. Creo que todos nosotros podemos identificarnos con esto de alguna manera.

Para mejorar nuestro golf, tiene que haber un cierto equilibrio entre estar en el campo de golf y dedicar tiempo a trabajar en tu juego. Aunque los horarios y los compromisos de tiempo de cada uno son diferentes, quiero ayudarte a entender algo fundamental sobre lo que se necesita para ser un mejor golfista.

 

Ser mejor golfista requiere experiencia

Pueden pasar muchas cosas en 18 hoyos. Puedes pasar por periodos de juego extraordinarios, y luego olvidar abruptamente cómo hacer el swing de golf dos hoyos más tarde. Los «cambios» emocionales que se producen son parte de lo que hace que el golf sea tan único y frustrante al mismo tiempo.

Una cosa que los golfistas aficionados suelen perder de vista es que es necesario estar en el campo pasando por todas esas pruebas y tribulaciones con el único objetivo de ganar experiencia. La mayoría de los jugadores que se convierten en mejores golfistas te dirán lo mismo: necesitas estar en el campo jugando. En cierto modo, jugar es la mejor forma de practicar.

En pocas palabras, hay que sentirse cómodo en un campo de golf. Hay muchos pequeños elementos en este juego que requieren cierta experiencia, y si no puedes jugar lo suficiente, entonces es difícil desarrollarlos.

 

¿Qué es un equilibrio razonable?

No puedo cuantificar el número de horas ni la proporción que hay que dividir entre el tiempo de práctica y el de juego. Lo que sí puedo decirte es que, en un momento determinado, pasar más tiempo practicando a expensas de jugar, probablemente producirá rendimientos decrecientes.

Sé que la mayoría de los que estáis leyendo esto tenéis trabajo, familia y todo tipo de compromisos de tiempo que ya hacen difícil encontrar ratos libres para jugar a golf, ni te digo para intentar ser mejor golfista. Esa es parte de la razón por la que hablo tanto de gestionar las expectativas, y por la que los golfistas aficionados acostumbran ser demasiado duros consigo mismos.

 

Muchos de nosotros no tenemos tiempo ilimitado para trabajar en nuestro juego y jugar tanto como nos gustaría. Sin embargo, si utilizas ese tiempo de forma efectiva, puedes ver la mejora.

 

 

 

 

Voy a describir tres escenarios hipotéticos para ilustrarlo:

 

Escenario #1 – Practicar con poco juego:

Si eres un golfista que puede realizar muchas sesiones de práctica de 30 a 60 minutos pero sólo puede jugar una o dos veces al mes – generalmente tiene sentido moderar las expectativas. Algunos jugadores tienen más talento natural que otros.

Sin embargo, a menudo encuentro que, si no eres capaz de poner a prueba tus habilidades y aprender de ellas con la suficiente frecuencia, es difícil obtener un rendimiento significativo de tu preparación. En general, si no puedes jugar lo suficiente, yo no esperaría demasiado, por mucho que entrenes en el campo de prácticas.

 

Escenario #2 – Practicar en lugar de jugar:

Si tienes más tiempo para ir al recorrido, pero eliges practicar más en lugar de jugar, te animo a que encuentres un mayor equilibrio. Cada vez que te pones en marcha en el recorrido, es una oportunidad para aprender y desafiarte a ti mismo.

Las cosas que has estado trabajando en las instalaciones de práctica, o en tu patio trasero, necesitan una oportunidad para ser probadas en acción real.

 

Escenario #3 – Todo juego, nada de práctica:

Algunos golfistas no quieren practicar en absoluto, y utilizan todo su tiempo libre para jugar en el recorrdio. Lo entiendo. Aunque creo que se puede aprender y mejorar jugando mucho al golf, es probable que se esté perdiendo la oportunidad de mejorar si no se trabaja en las habilidades fuera del campo.

Todas las pistas sobre tu juego se esconden en tu rendimiento en el campo. Si puedes dedicar tiempo a analizar lo que ocurre durante tus vueltas, y utilizar esa información para trabajar en algunos de los elementos de tu juego que son deficientes, casi siempre los mejores frutos no están al alcance de la mano esperando a ser recogidos.

 

Todo es cuestión de nivel de comodidad

Hablando anecdóticamente, el mejor golf que he jugado en mi vida siempre ha sido cuando he podido ir al recorrido con frecuencia. También he tenido la oportunidad de aprender y estar rodeado de muchos golfistas a los que he visto hacer avances significativos en su juego.

Además, jugaban lo suficiente como para permitir que se produjeran esos cambios positivos. Ser mejor golfista requiere un cierto nivel de comodidad para estar realmente en el campo de golf. Eso es casi imposible de reemplazar durante la práctica.

 

Si no puedes jugar lo suficiente al golf, no pasa nada – todavía hay una oportunidad de ser mejor golfista. Sin embargo, te advierto que seas un poco más paciente contigo mismo. Si sólo puedes jugar una vez al mes, no utilices esa única ronda como prueba de fuego de tu juego.

Jugar una vez cada 30 días no es suficiente para obtener una medida razonable de tu situación. Intenta disfrutar de tu tiempo fuera, lejos de las distracciones del mundo, y no te presiones demasiado.

 

El mejor tipo de práctica

No todos pueden hacerlo, pero si puedes practicar en el campo, házlo.

 

Si mi campo está vacío entre semana, suelo salir a practicar de 2 a 4 hoyos. En cada hoyo, intento dar varios golpes de salida y de aproximación. También tiro unas cuantas bolas alrededor de los greens y golpeo con un wedge desde varias distancias.

Esta forma de practicar es muy valiosa, y si puedes encontrar pequeños espacios de tiempo para hacerlo en un recorrido sin molestar a otros jugadores, te recomiendo que lo hagas.

 

Para terminar

Digamos que tienes la oportunidad de jugar una vez a la semana. Creo que es una oportunidad mucho más razonable para poner a prueba lo que has estado trabajando en tus sesiones de práctica y lograr un equilibrio entre el juego y la preparación.

 

De hecho, no hay una respuesta correcta para todos los golfistas. Pero los dos puntos principales que me gustaría transmitir son:

 

1. Sólo puedes sacar provecho de tu práctica si juegas lo suficiente
2. Una gran parte de la mejora del golf es el nivel de comodidad en un campo de golf

 

Ten esto en cuenta al afrontar tu próxima vuelta de golf. Es imposible encontrar el equilibrio perfecto, pero el uso de algunas de estas pautas puede ayudarte a realizar ajustes en la forma de emplear el tiempo y a tener expectativas más saludables para tu juego.
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Marc Puig Marc@SotaPar.com  @Golfing_marc

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