Algo que todas las personas aficionas al golf tienen claro, es que si desean mejorar su swing o su juego (en general) deben practicar.
Bastante.
Sin embargo, algo que la mayoría de personas no tienen claro es como practicar.
Qué ejercicios usar para mejorar su juego.
O algo peor.
No entienden en qué están trabajando, ni mucho menos de que trata el ejercicio. En definitiva, a la práctica, para qué va a servir.
En esta entrada seguiremos la serie de “golf de confinamiento” proponiéndoos nuevas formas de entrenar y mejorar vuestro golf.
Con aplicaciones prácticas,
Explicaciones detalladas,
Rápida evolución.
Si eres constante. Fórmulas mágicas no existen (y si la tuviera, seguramente estaría jugando el Tour y me veríais en la tele).
PARTE I*
Seguiremos ampliando con más ejercicios en entradas posteriores. Pero en esta línea
Algo con lo que siempre me gusta ser pesado. Es mejor calidad que cantidad. Tómate tu tiempo, trabaja cada ejercicio con paciencia. Si mejoras en cada pequeño aspecto verás una gran evolución en todo tu golf.
Pero pasito a pasito.
Golpe a golpe.
Swing tras swing.
Antes de empezar.
Los siguientes ejercicios están descritos desde la perspectiva de un golfista diestro.
Personas zurdas del mundo del golf, las grandes olvidadas, disculpas de antemano. Para seguirlos, debemos “cambiar las direcciones” a modo de espejo.
Número 1: Arranque de swing
Un buen swing comienza con un buen arranque. Moviendo el palo de forma adecuada, fusionando; palo, manos, brazos y hombros en una sola unidad.
Para garantizar que estamos realizando un buen arranque de swing:
Paso 1
Colocamos una bola en el suelo.
Paso 2
Nos cuadramos en stance. Colocando la cabeza del palo, un palo largo a la izquierda de la bola.
Paso 3
Iniciamos el movimiento de swing notando el contacto con el suelo “peinando la hierba”
Paso 4
Hacemos contacto y empujamos la bola con la parte trasera del palo
Paso 5
Iniciamos la rotación
Repeticiones:
La forma ideal para practicar este ejercicio es realizar unas 10 repeticiones y después 2 swings enteros.
Objetivos:
Este ejercicio pretende desarrollar la sincronización de la parte superior del cuerpo, para moverse como un solo bloque al inicio del swing.
Número 2: Giro de cadera
La rotación de las caderas es fundamental para un swing consistente. Debemos ser conscientes de que las utilizamos para dos rotaciones.
Hacia detrás, al realizar la subida del palo y hacia delante tras el impacto.
A mayor eficiencia en nuestro giro de caderas durante el swing, más solidez en el impacto, y por lo tanto, golpes más penetrantes.
Paso 1
Nos clocamos en posición de stance, apretando un palo (en posición horizontal) contra la hebilla de nuestro cinturón.
Paso 2
Rotamos hacia la derecha, imitando el movimiento de subida. De forma lenta, notando como giramos
Paso 3
Al llegar a nuestro límite, intentamos aguantar en la posición e incluso ganar algún centímetro más de giro.
Paso 4
Iniciamos el desgiro, pasando por el área de impacto e imitando el final del swing.
Repeticiones:
Realizaremos 10 repeticiones progresivas tratando de acompasar y equilibrar los dos giros en un movimiento fluido.
Objetivos:
Entrenando este ejercicio conseguiremos entrenar a nuestro cuerpo para desgirar de forma correcta las caderas en el swing.
Si somos constantes y nos esforzamos, podremos ampliar nuestro ángulo de giro. Logrando mayor amplitud de swing.
Número 3: Backswing perfecto
La mayoría de golfistas aficionados, tienen problemas con el backswing. No saben con certeza donde debe estar el palo en la cima del swing.
Y lo que es peor, no puede verse o sentir como el palo debería estar de forma correcta en el tope de nuestro backswing.
Para colocar el palo en la posición perfecta y experimentar vía sensaciones, cuál es nuestra postura ideal. Realizaremos el swing en 3 pasos.
Posición inicial
Nos cuadramos en stance, con un hierro medio.
Paso 1
Levantamos el palo verticalmente, hasta apoyar la varilla en nuestro hombro derecho.
Paso 2
Realizamos nuestra rotación de subida de palo normalmente. Parando al final de la subida.
Paso 3
Manteniendo la posición, levantamos los brazos separándolos del cuerpo. YA ESTAMOS EN LA POSICIÓN PERFECTA
Repeticiones:
Este ejercicio es de pura sensación. Os recomendaría que lo trabajarais por tiempo, durante unos 10 minutos. Poniendo máxima atención a la sensación y postura que adoptamos.
Objetivo:
Perseguimos comprender, y notar, como debemos sentir el palo en la parte final del backswing, antes de iniciar la bajada.
¡Recordad! Sentir el peso de la cabeza, notar la cara del palo, nuestras manos muñecas es muy importante para golpear consistentemente a la bola.
Trabajando estos 3 ejercicios lograremos mejorar mucho nuestro swing. Sin muchas complicaciones teóricas ni pérdidas de tiempo.
Además, puedes utilizarlos en el campo de prácticas.
Alternando entre golpes y ejercicios.
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Todos los consejos de Marc, así como los de Xavi, son perfectos y funcionan estupendamente……….de profesionales.
Gracias!!!
Me parecen unos ejercicios muy interesantes. Los practicará
¡Muchas gracias Amadeo! Ánimo con la práctica 😉